Durgyka PORTES
Traductora de formación, profesora de español por pasión. Mamá de una familia bilingüe en Francia. Autora del blog
En el mundo globalizado de hoy nadie duda de la importancia de dominar un idioma extranjero. Como adultos sabemos que son múltiples los beneficios de hablar un segundo idioma, ya sea en el plano personal o profesional. El acceso a mayor cantidad de fuentes de información y a mejores oportunidades profesionales son solamente 2 de las razones de peso para aprender una segunda lengua entre los adultos. ¿Pero y en el caso de los niños? Muy pocos padres ven el interés de iniciar a sus hijos pequeños en el aprendizaje de idiomas por una vieja creencia que considera que el bilingüismo produce confusión. ¡Nada más lejos de la verdad! A continuación te presento algunos de los beneficios que aporta a los niños saber un segundo idioma.
Ventajas de aprender un segundo idioma en la niñez
⦁ Aumenta las capacidades cognitivas. Estudios demuestran que los niños bilingües son más aptos para realizar tareas múltiples que los niños monolingües. Al parecer, el hecho de tener que escoger entre un idioma u otro en un momento preciso representa una suerte de “gimnasia cerebral” que los ayuda a pasar de una actividad a otra con menor esfuerzo y a concentrarse mejor.
⦁ Incrementa la capacidad en la lengua materna. Aprender un idioma extranjero nos ayuda a comprender mejor la gramática de nuestra lengua materna. Hace años se creía que enseñar un segundo idioma a los niños los podría llevar a una confusión en su propia lengua. En la actualidad se sabe que, al contrario, los niños que hablan un idioma extranjero tienen una visión más crítica del funcionamiento de su primera lengua.
⦁ Mejora las capacidades analíticas y creativas. Un estudio publicado en el ⦁ International Journal of Bilingualism demostró que entre los 121 niños observados, los niños bilingües obtenían mejores resultados en cálculos mentales y resolución de problemas.
Todos los créditos de este artículo a Durgyka Portes, (crestomatia)
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